tango
Argentina Texas

Mi romance con el tango argentino

tango

Ver bailar a esa pareja despertó el interés latente que siempre he tenido por el baile. “Esta es”, me digo. “Esta es la danza que quiero aprender”. ¿Cómo no enamorarse del tango, una danza que despierta pasión mediante una mezcla de movimientos sensuales, gráciles y elegantes?

En la pista hay cuatro parejas. Me llama la atención una mujer de rojo. Es delgada; tiene el cabello negro brillante trenzado hacia un lado. Sus ojos están cerrados, su mejilla derecha toca la de su compañero. Da pasos largos y elegantes al compás de una melodía inconfundible: el tango “Volver” de Carlos Gardel.

La luz es tenue, pero puedo ver claramente cómo ella y su pareja bailan con una sincronía que me deja extasiada. El abrazo es estrecho. El movimiento de sus piernas es grácil y febril al mismo tiempo. Más que un baile, uno parece estar contemplando el diálogo íntimo de una pareja envuelta en los brazos del amor.

“Sentir, que es un soplo la vida, que veinte años no es nada, que febril la mirada, errante en las sombras te busca y te nombra. Vivir, con el alma aferrada, a un dulce recuerdo, que lloro otra vez,” dice Gardel en su canción, anhelando a su amada.

Cuando la música termina estoy absolutamente pasmada. Acabo de presenciar la vida entera de un romance argentino en un suspiro de 3 minutos, más otro minuto que me toma recuperar el aliento, sin haber salido de Texas. Es como si me hubiera transportado a una milonga en Buenos Aires.

El tango: un lenguaje universal

¡Mi primer encuentro con el tango argentino! Ese baile apasionado con un toque melancólico que tuve la fortuna de ver recientemente iluminando los pisos de Esquina Tango, una organización cultural en Austin, cuya misión es promover el aprecio por las culturas latinas a través de bailes como el tango.

tango
Illustration by © Svetlana Tananykina | dreamstime.com

Todos sabemos que el baile es un lenguaje sin fronteras. Y el tango ha infundido, en los últimos 125 años, una gran pasión a individuos y parejas por igual desde sus orígenes en Argentina y Uruguay a fines de los años 1800s.

Es un lenguaje universal tan poderoso y reconocido que en 2009 la UNESCO lo agregó a sus listas como patrimonio cultural inmaterial de la humanidad.

La caminata: Un elemento esencial del tango

“Lo más importante en el tango es caminar”, dice Miki, un argentino que reside en Austin desde hace ocho años y que empezó a bailar tango apenas hace siete años. “Cierra tus ojos y escucha la música”.

tango
Illustration by © Artisticco Llc | dreamstime.com

Sigo el consejo, cierro los ojos y me dejo llevar por esa música cadenciosa derivada de una fusión de ritmos europeos y africanos que me hace sentir más relajada y sexy, el remedio perfecto para una vida más sana.

“En el tango la mujer no comete errores,” dice Patrick, un estadounidense y mi segunda pareja de baile de la noche, cuando me disculpo por dar un paso equivocado. “La culpa es siempre del hombre,” agrega. Y seguimos bailando como si nada hubiera pasado.

Hay algo extrañamente liberador y seductor en este acuerdo.

La coreografía del tango

En la pareja tradicional de tango, hombre-mujer, los roles de género están bien definidos. Esto quiere decir que el hombre es quien crea y dirige el baile y la mujer es quien lo sigue. Sin embargo, la coreografía tanguera también admite que ocasionalmente sea la mujer la que “marque” el paso al hombre. Ella puede avivar las llamas o dejar que el fuego se apague lentamente.

tango
Illustration by © Svetlana Tananykina | dreamstime.com

En definitiva, el tango se baila “escuchando el cuerpo del otro”, dice Gustavo, nacido en Buenos Aires y uno de los maestros de tango en Esquina Tango, que abrió sus puertas en 2008.

El tango argentino se baila en tres tandas (tango, vals, milonga), y en todas ellas “la conexión de la pareja nunca se pierde”, dice Gustavo, quien lleva una década enseñando a bailar tango a los habitantes de Austin.

Así que aquí estoy, en mi cuarta sesión de tango, decidida a aprender esta danza de amor y melancolía antes de viajar a Argentina el próximo verano. Tengo un gran deseo por mantener vivo el romance.

Write a comment